Oración del Señor
Porque tuyo es el reino,
el poder y la gloria —
Santificado por tu nombre, entonces
Tú que no tienes nombre —
Dame, oh, dame,
además del pan de cada día,
mi reino, mi poder y mi gloria.
Todas las cosas que vuelven a ti
tienen su reino, su poder y su gloria.
Como el reino del ruiseñor al alba,
cuyo poder y gloria he visto y sentido muchas veces.
Como el reino del zorro en la oscuridad,
aullando con su poder y su gloria
que es la muerte de la oca.
Como el poder y la gloria de la oca en la niebla
graznando en el lago.
Y yo, un hombre desnudo, gritando
pidiéndote en voz alta mi maná,
mi reino, mi poder y mi gloria.
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
imagen: The Worship of Mammon (1909), por Evelyn de Morgan
Lord’s Prayer
For thine is the kingdom
the power, and the glory —
Hallowed be thy name, then
Thou who art nameless —
Give me oh give me
besides my daily bread
my kingdom, my power, and my glory..
All things that turn to thee
have their kingdom, their power, and their glory.
Like the kingdom of the nightingle bt twilight
whose power and glory I have often heard and felt.
Like the kingdom of the fox in the dark
yapping in his power and his glory
which is death to the goose.
Like the power and the glory of the goose in the mist
hooking over the lake.
And I, a naked man, calling
calling to thee for my manna,
my kingdom, my power, and my glory.
Plegaria moderna
¡Omnipotente Mammón, hazme rico!
¡Hazme rico pronto, sin jamás un escollo
en mi estupenda prosperidad! ¡Arroja a la zanja a quienes
me ponen trabas, Mammón, grandioso hijo de puta!
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
Modern Prayer
Almighty Mammon, make me rich!
Make me rich quickly, with never a hitch
in my fine prosperity! Kick those in the ditch
who hinder me, Mammon, great son of bitch!
Paga
La paga del trabajo es el dinero.
La paga del dinero es desear más dinero.
La paga de querer más dinero es la competencia salvaje.
La paga de la competencia salvaje es — el mundo en que vivimos.
El círculo trabajo-paga-deseo es el círculo más vicioso
que jamás convirtió a los hombres en demonios.
Ganar un jornal es un quehacer carcelario
y un jornalero es una especie de preso.
Ganar un sueldo es un trabajo de carcelero,
un guardia en vez de un preso.
Vivir de nuestras rentas es pasearse a lo grande fuera de la prisión
con terror de tener que entrar. Y como la prisión del trabajo
cubre casi toda la faz de la tierra, uno se pasea de aquí para allá
en una ronda limitada, más o menos como un preso haciendo ejercicio.
A esto se llama libertad universal.
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
Wages
The wages of work is cash .
The wages of cash is want more cash.
The wages of want more cash is vicious competition.
The wages of vicious completion is — the world we live in.
The work-cash-want circle is the viciousest circle
that ever turned men into fiends.
Earning a wage is a prison occupation
and a wage-earner is a sort of gaol-bird
Earning a salary is a prison overseer’s job,
a gaoler instead of a gaol-bird .
Living on your income is strolling grandly outside the prison
in terror lest you have to go in .And since the work-prison covers
almost every scrap of living earth, you stroll up and down
on a narrow beat, about the same as a prisoner taking his exercise .
This is called universal freedom.
miércoles, 1 de diciembre de 2010
D. H. Lawrence
domingo, 3 de octubre de 2010
Carew ≈ Suckling ≈ Lawrence // 4 poemas sobre el amor
Thomas Carew / Rechazo de la mediocridad en el Amor
Dame más Amor o más Desdén;
la Zona Tórrida o la Helada
traen igual alivio a mi dolor;
ninguno me ofrece la Templada;
cualquier extremo, del Odio o del Amor,
más dulce es que la calma.
Dame una tormenta; si es Amor,
nadaré como Dánae con placer
en esa lluvia de oro; si Desdén,
mis esperanzas rapaces
el torrente han de comer; y del Cielo
sólo quien se libra del Infierno es poseedor.
Por tanto, corona mi dicha o cura mi dolor;
dame más Amor o más Desdén.
Thomas Carew, Inglaterra, 1595-1640.
Versión © Gerardo Gambolini
imagen: Thomas Carew, John Suckling, D. H. Lawrence
Mediocritie in Love Rejected
Give me more Love or more Disdaine;
The Torrid, or the Frozen Zone,
Bring equall ease unto my paine;
The Temperate affords me none;
Either extreme, of Love, or Hate,
Is sweeter than a calme estate.
Give me a storme; if it be Love,
Like Danae in that golden showre
I swimme in pleasure; if it prove
Disdaine, that Torrent will devoure
My Vulture-hopes; and he’s posest
Of Heaven, that’s but from Hell releast:
Then crowne my joyes, or cure my paine;
Give me more Love, or more Disdaine.
Thomas Carew / Belleza ingrata amenazada
Sabe, Celia, ya que eres tan orgullosa,
que fui yo quien te ha dado tu renombre;
tú habrías vivido ignorada
en la olvidada legión de las bellezas comunes
si mis versos no te hubieran exaltado
y emplumado con ello las alas de tu fama.
Ese poder letal no es tuyo en absoluto,
yo se lo dí a tu voz y a tus ojos;
son míos tus encantos y tus gracias;
tú eres mi estrella y brillas en mis cielos;
no arrojes, desde esa esfera prestada,
relámpagos a aquel que allí te ha puesto.
No me provoques más con esos miedos,
no sea que deshaga lo que he hecho;
que los necios adoren tus formas imaginarias,
yo te conozco en tu hechura mortal;
los poetas sagaces que envolvieron en cuentos la Verdad,
siempre la conocieron, con todos sus velos.
Thomas Carew, Inglaterra, 1595-1640.
Versión © Gerardo Gambolini
Ingrateful Beauty Threatened
Know Celia, since thou art so proud,
‘Twas I that gave thee thy renown;
Thou hadst, in the forgotten crowd
Of common beauties, liv’d unknown,
Had not my verse exhal’d thy name,
And with it imp’d the wings of fame.
That killing power is none of thine,
I gave it to thy voice, and eyes;
Thy sweets, thy graces, all are mine;
Thou art my star, shin’st in my skies;
Then dart not from thy borrow’d sphere
Lightning on him that fix’d thee there.
Tempt me with such affrights no more,
Lest what I made, I uncreate;
Let fools thy mystic forms adore,
I’ll know thee in thy mortal state;
Wise poets that wrapp’d Truth in tales,
Knew her themselves, through all her veils.
John Suckling / El amante fiel
¡Vaya! He amado
tres días enteros seguidos;
y quizás ame tres más
si el clima es bueno.
El Tiempo mudará las plumas de sus alas
antes de hallar de nuevo
en todo el ancho mundo
un amante así de fiel.
Pero lo odioso en eso es,
no merezco elogio alguno:
el Amor no habría hecho un alto en mí
si fuera otra y no ella.
Si fuera otra y no ella,
y ese rostro exactamente,
en su lugar habría
cuando menos diez docenas.
John Suckling, Inglaterra, 1609-1642
Versión © Gerardo Gambolini
The Constant Lover
Out upon it! I have loved
Three whole days together;
And am like to love three more,
If it prove fair weather.
Time shall molt away his wings
Ere he shall discover
In the whole wide world again
Such a constant lover.
But the spite on't is, no praise
Is due at all to me:
Love with me had made no stay,
Had it any been but she.
Had it any been but she,
And that very, very face,
There had been at least ere this
A dozen dozen in her place.
D. H. Lawrence / ¡No, Mr. Lawrence!
¡No, Mr. Lawrence, no es así!
Yo sé algo del amor,
no me molesta decirle.
Más que usted, a lo mejor.
Y lo que sé es que usted
exagera su encanto, su beldad.
No es así. Usted lo falsea, ¿sabía?
Es bastante aburrido, en realidad.
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
No! Mr Lawrence!
No, Mr Lawrence, it’s not like that!
I don’t mind telling you
I know a thing or two about love,
perhaps more than you do.
And what I know is that you make it
too nice, too beautiful.
It’s not like that, you know; you fake it.
It’s really rather dull.
sábado, 25 de septiembre de 2010
D. H. Lawrence / 3 poemas
Lucifer
Los ángeles siguen brillando, aunque el más brillante cayó.
Pero díganme, díganme, ¿cómo saben
que perdió todo su brillo en la caída?
En las azules profundidades, bajo capas y capas de oscuridad,
lo veo moverse como el rubí, un destello desde dentro
de su propia magnificiencia,
venir como el rubí en la invisible negrura, brillando
con su propia anunciación, hacia nosotros.
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
imagen: Lucifer, grabado en madera de Peulot, 1891
Lucifer
Angels are bright still, though the brightest fell.
But tell me, tell me, how do you know
he lost any of his brightness in the falling?
In the dark-blue depths, under layers and layers of darkness,
I see him more like the ruby, a gleam from within
of his own magnificence,
coming like the ruby in the invisible dark, glowing
with his own annunciation, towards us.
Fuego
El fuego es más caro para nosotros que el amor o la comida,
caliente, excitante, pero quema si lo tocas.
Lo que debemos hacer
no es sumar nuestro amor ni nuestra buena voluntad ni nada de eso,
porque seguro incluiremos un montón de mentiras,
sino nuestro fuego, nuestro fuego elemental,
para que se eleve de golpe en una enorme llama como un falo que
penetra en el espacio
y fecunda el cenit y el nadir
y lanza millones de chispas de átomos nuevos
y nos chamusca, e incendia la casa.
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
Fire
Fire is dearer to us than love or food,
hot, hurrying, yet it burns if you touch it.
What we ought to do
is not add our love together, or our goodwill, or any of that,
for we're sure to bring in a lot of lies,
but our fire, our elemental fire
so that it rushes up in a huge blaze like a phallus into hollow space
and fecundates the zenith and the nadir
and sends off millions of sparks of new atoms
and singes us, and burns the house down.
Anaxágoras
Cuando Anaxágoras dice: ¡Hasta la nieve es negra!
los científicos lo toman muy en serio
porque está enunciando un ‘principio’, una ‘ley’ —
que todas las cosas son compuestas, y por lo tanto la más pura nieve blanca
tiene en ella un elemento de negrura.
A eso lo llaman ciencia, y realidad.
Yo lo llamo vanidad mental y fraude
y tonterías, porque la nieve pura es blanca para nosotros
blanca y blanca y sólo blanca
con una encantadora eclosión de blancura en el blanco
en el que el alma se deleita y los sentidos
experimentan la dicha.
Y la vida es para el goce, y la dicha
y el temor, y la oscura, arrolladora amenaza del final.
Luego otra vez el brillante amanecer del regocijo
ante la pura nieve blanca, o la luna suspendida.
Y a la caída del sol la nieve es azul, tan fríamente azul
con un toque de los pétalos helados de la flor de Scilla
pero nunca la sombra de un reflejo del negro fúnebre de Anaxágoras.
David Herbert Lawrence, Gran Bretaña, 1885-1930
Versión © Gerardo Gambolini
Anaxagoras
When Anaxagoras says: The snow is black!
he is taken by the scientists very seriously
because he is enunciating a ‘principle’, a ‘law’
that all things are mixed, and therefore the purest white snow
has in it an element of blackness.
That they call science, and reality.
I call it mental conceit and mystification
and nonsense, for pure snow is white to us
white and white and only white
with a lovely bloom of whiteness upon white
in which the soul delights and the senses
have an experience of bliss.
And life is for delight, and for bliss
and dread, and the dark, rolling ominousness of doom
then the bright dawning of delight again
from off the sheer white snow, or the poisoned moon.
And in the shadow of the sun the snow is blue, so blue-aloof
with a hint of the frozen bells of the scylla flower
But never the ghost of a glimpse of Anaxagoras’ funeral black.